A lo largo de todo el año la asociación de personas con discapacidad Virgen de Consolación de Utrera (APDIS), lleva a cabo numerosas actividades dirigidas a este colectivo, con el objetivo de prestar el asesoramiento y el apoyo que precisan. Una de las actividades más entrañables que organiza este colectivo utrerano es el campamento de verano, que este año ha contado con 21 participantes.

Dentro de los fines de esta entidad también se encuentra favorecer la vida independiente de sus socios y socias y proporcionarles una oferta de ocio  y tiempo libre integradora. El campamento de verano ha cumplido este año su cuarta edición, contando en anteriores ediciones con destinos tan atractivos como el Parque Norte de la provincia de Sevilla, la sierra de Huelva o Sierra Nevada.

Este año el campamento se ha celebrado en otro paraje de gran interés medioambiental de la comunidad andaluza, como es el caso del valle de Los Pedroches, en la provincia de Córdoba, concretamente en el complejo Turismo Activo Tavabu Multiaventura, donde los participantes han compartido emociones, diversiones, aventuras y máxima seguridad en plena naturaleza en un recinto con más de 65.000 metros cuadrados de encinar junto a un hermoso río.

Todos los participantes en la actividad han podido disfrutar de puentes colgantes, rocódromo, gran tirolina de 60 metros de longitud, campo de tiro con arco, gran salón comedor con chimenea totalmente climatizado, gran edificio con habitaciones y baños, piscina, carpa para actividades y gran cantidad de material didáctico.

Las personas que han participado están afectadas por distintos tipos de discapacidad, física, psíquica y mental, por lo que han estado con ellos en el campamento diez voluntarios de APDIS, además de los profesionales de Tavabu Multiaventura, que los han asesorado en las distintas fases y actividades del campamento: preparación, viaje, desarrollo de actividades, alimentación, higiene personal, cuidado personal, etc. Han sido cuatro días intensos, llenos de actividad, donde han podido llevar a cabo talleres, juegos, actividades lúdicas, como cualquier chaval de su edad, siempre monitorizado y en las máximas condiciones de seguridad  reglamentarias.

Con todas estas actividades se favorece la vida independiente, al sentirse las personas con discapacidad capaces de desarrollar actividades que no creían poder realizar, se fomenta su autonomía, las relaciones con personas de su misma edad, sin el apoyo de sus familiares, desenvolviéndose con total normalidad.

La puesta en marcha del campamento también tiene como objetivo propiciar el respiro familiar, ya que son personas que dependen en gran parte de sus familiares y disponen de esos días para que puedan realizar actividades que no podrían llevar a cabo de otra forma. Una actividad que ha contado con el apoyo económico del Ayuntamiento de Utrera.