Profesionales de la Unidad de Cuidados Críticos y Urgencias del Hospital Universitario de Valme han potenciado la creación de una asociación de antiguos pacientes de este dispositivo, que nace bajo el nombre de «Embajadores de Vida» y que tiene por objetivo contribuir a la recuperación a través del voluntariado.

La iniciativa se basa en ayudar a las personas ingresadas en esta unidad clínica de extrema vigilancia a superar la enfermedad, con apoyo psicológico y emocional, como estrategia de participación ciudadana para la humanización asistencial.

Esta asociación tiene su antecedente en Andalucía en una experiencia similar desarrollada en el Hospital Virgen de la Victoria de Málaga. Compuesta por una docena de voluntarios, cada miércoles los pacientes ingresados en la Unidad de Cuidados Críticos de Valme recibirán así la visita de enfermos recuperados.

Previamente, estos voluntarios han pasado por un período de formación en el cual los profesionales de esta unidad clínica los han instruido en diversas áreas para facilitarles su integración en el entorno hospitalario: normas de higiene y seguridad, habilidades para afrontar situaciones delicadas que pueden surgir durante el desarrollo de la actividad y forma idónea de hacer el recorrido por la unidad clínica, entre otras.

Además, estos voluntarios manejarán en su hoja de ruta futura llegar a la familia de los pacientes. Es decir, que su apoyo se extienda a la familia y cuidadores de estos enfermos concienciándolos de los cambios de hábitos y estilos de vida que tienen que asumir tras la enfermedad.

La creación de esta asociación se suma a la experiencia adquirida por este hospital sevillano en el voluntariado dirigido a pacientes con patologías coronarias. Desde hace ocho años, los pacientes de la planta de Cardiología del Hospital de Valme disponen periódicamente de visitas de pacientes rehabilitados que transmiten su optimismo en la recuperación de la enfermedad.

Sin embargo, la novedad de esta iniciativa es el lugar donde se está desarrollando y el origen de los voluntarios. Por un lado, la Unidad de Cuidados Intensivos es un dispositivo de enfermos críticos donde las visitas suelen estar muy restringidas. En cambio, desde hace varios años el Hospital de Valme apostó por una mayor flexibilidad en el acceso de los familiares en beneficio de la recuperación de los enfermos.