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Más de 5.000 personas cuidadoras del Distrito de Atención Primaria tienen la tarjeta +Cuidado

Este documento identificativo sirve para «mejorar y priorizar la atención y accesibilidad de las personas cuidadoras de enfermos dependientes en el sistema sanitario público de Andalucía»

Un total de 5.141 personas cuidadoras del Distrito de Atención Primaria de Sevilla en la capital son portadoras de la Tarjeta +Cuidado, prestación perteneciente al Plan de Atención a la Cuidadora de la Consejería de Salud y Bienestar Social, según los datos difundidos este viernes por este departamento.

Esta tarjeta es un documento identificativo que nació en 2009 para «mejorar y priorizar la atención y accesibilidad de las personas cuidadoras de enfermos dependientes, con enfermedades como Alzheimer, en el sistema sanitario público de Andalucía».

Los beneficiarios tienen atención preferente en las consultas de los centros de salud. Además, se les facilita la resolución de trámites administrativos, como la obtención de recetas, se les ofrece un plan de cuidados personalizado y se les distribuye material de apoyo para los cuidados a domicilio

Asimismo, las cuidadoras pueden acompañar a su familiar en todo momento, incluido la realización de pruebas diagnósticas, lo que evita los posibles episodios de desorientación que sufren estos pacientes.

De estas 5.141 personas cuidadoras, un 40 por ciento lo son de pacientes con demencia y un 34 por ciento de estos pacientes disponen de material de ayuda para los cuidados en el domicilio. El resto son personas cuidadoras de grandes discapacitados con dependencia severa o total y deterioro cognitivo.

Las personas portadoras de la Tarjeta +Cuidado se benefician, además, de las medidas de mejora puestas en marcha «para facilitar la accesibilidad a las Unidades de Atención al Ciudadano, tales como la priorización de citas en el centro para el paciente» y la persona cuidadora para todos los profesionales implicados en el seguimiento de ambos.

Los profesionales sanitarios, a disposición del paciente

Las enfermeras de familia y gestoras de casos han informado de su disponibilidad de horarios pactando espacios propicios para las visitas a los pacientes según los deseos de las personas cuidadoras, dentro de las posibilidades reales de atención. En caso de ausencia de la persona cuidadora por motivos laborales «se facilita la comunicación informando por escrito de la localización y disponibilidad horaria de su enfermera».

Igualmente, si el paciente requiere ingreso hospitalario, se le facilita la dieta a las cuidadoras y se flexibiliza el horario de visitas para adecuarlo a sus necesidades. Además, durante su estancia en el hospital los profesionales de enfermería «promueven entre las cuidadoras actividades formativas sobre cuidados e información en educación sanitaria» y se establece un circuito preferente que prioriza el traslado de estos ciudadanos en el servicio de transporte sanitario.

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