El peso de la edad provoca que asiduos de una hermandad no puedan participar cuanto quisieran en la vida de ésta. Por ello, la Hermandad de los Estudiantes pone una marcha una bonita iniciativa con la que los mayores y también las personas con movilidad reducida puedan acudir a misa o a la casa hermandad.

Según cuenta el secretario segundo, Juan Carvajo, esta es una práctica que se puso en marcha en el curso 2011-2012 y en la que «los que participaron lo agradecieron mucho». El buen funcionamiento de ese caso hace que la hermandad vuelva a querer ponerlo en funcionamiento de nuevo y hace un llamamiento a los jóvenes y a todo aquel que quiera colaborar para que participen.

«Sabemos de hermanos que no pueden asistir porque tienen una movilidad reducida y sus hijos están trabajando y no los pueden acercar», cuenta Juan. Para esos casos, los jóvenes que se presten se acercarán a casa de quien lo desee para acompañarlo a la capilla universitaria o la casa de hermandad, especialmente los martes ya que es el día de hermandad.

Está previsto que el proyecto se ponga en marcha para el próximo curso a partir de septiembre, puesto que en verano las personas mayores tienen más dificultades para salir de casa por el calor. Durante estos meses, quien conozca a un hermano que pueda beneficiarse de esta labor o quiere ofrecer su ayuda, puede ponerse en contacto con la secretaria o el diputado de acción social, Antonio Cañas.