Las colonias que acercan a los niños sevillanos al mar
«Es uno de los mayores tesoros de la Hermandad». Así define Ricardo Morales, Diputado de Caridad de la Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Triana, sus colonias de verano, que este año han alcanzado las 45 ediciones.
En concreto, la actividad, que comenzó el pasado día 14 de julio y ha durado una quincena, ha contado con la participación de 182 niños de entre 3 y 14 años. La mitad de estos menores proviene de instituciones de acogida y tutelares, y el resto son miembros de familias atendidas por la Bolsa de Caridad de la Hermandad y de zonas desfavorecidas como Las Tres Mil Viviendas o Los Pajaritos.
«En estos quince días en los que hemos estado alojados en la Casa de Hermandad en la Aldea, además de ir a diario a la playa, algo que a los niños les encanta, hemos hecho dos excursiones, a Isla Mágica y a Aquópolis», explica Morales. Por otro lado, a diario se han organizado actividades de ocio y aprendizaje.
En cuanto a la logística de las Colonias, el grupo de menores ha estado a cargo de 40 monitores, otros diez monitores en formación y hasta una veintena de voluntarios que se encargan de que todo esté en perfectas condiciones y que dedican sus vacaciones de verano a colaborar en esta gran causa solidaria. «Es un proyecto muy significativo para nosotros, ya que la mayoría de integrantes pertenecen a la Hermandad, por lo que se crea un sentimiento de unión y convivencia fraternal que también beneficia mucho a los participantes», explica el Diputado de Caridad. La financiación corre a cargo de la Hermandad, que ha contado también con la ayuda de numerosos donantes. Y es que, como ya avisaba el Hermano Mayor, José Román Carrasco, «cualquier tipo de ayuda es siempre de gran valor».
Gran ambiente
Y es que las Colonias permiten a los pequeños disfrutar en un ambiente sano y evadirse de los problemas que, en ocasiones, sufren en sus entornos de origen, además de inculcarles otras cuestiones relativas al respeto, los valores cristianos, la higiene e, incluso, los buenos hábitos alimenticios.
«Siempre nos gusta destacar que, gracias a que nosotros, en su día, fuimos pioneros con esta iniciativa, son muchas las hermandades sevillanas que se han sumado a esta bonita causa», detalla Morales, que afirma que El Rocío se convierte en estas semanas de verano «en una gran colonia infantil».