La Orden de Malta amplía su atención con un Centro de Acción Social en la calle Torneo

En el nuevo local se podrá continuar en mejores condiciones con atenciones prestadas en el comedor y añadir otras, como una consulta médica y una sala para cursos de formación

La Fundación Hospitalaria de la Orden de Malta en Andalucía ha demostrado en su comedor social de la calle Mendigorría cómo hacer frente a las adversidades en un 2020 donde la alimentación se había convertido en una necesidad básica difícil de cubrir para muchos. Hoy, cuando da más de 220 comidas diarias y entrega alimentos y atiende a un total de 47 familias, da un paso más.

La orden ha abierto un Centro de Acción Social en la calle Torneo, destinado a la integración de personas que están en proceso de inclusión social. El local ha sido inaugurado la mañana de este lunes con la presencia del alcalde de Sevilla, Juan Espadas; el delegado de Bienestar Social y Empleo del Ayuntamiento hispalense, Juan Manuel Flores; el delegado de la Orden de Malta en Sevilla, Miguel Enrile; la directora territorial de CaixaBank en Andalucía Occidental y Extremadura, María Jesús Catalá; la directora delegada de proyectos médicos de la Asamblea de la Orden de Malta, Marisa Fernández; y la Hospitalaria de la Orden de Malta en España, Alin Finat.

«Estamos muy ilusionados, esto nos permitirá atender mejor a la personas de la calle y ofrecer a las familias cursos que les ayuden a encontrar trabajo o gestionar mejor los alimentos en la cocina», explica Miguel Enrile a Sevilla Solidaria. El Centro de Acción Social, que ya estaba planeado desde antes del comienzo de la pandemia, contará con una sala para la Asesoría Jurídica, una consulta médica, una sala para impartir cursos de formación y pasará a ser la sede de la Orden. Algunas de las acciones, como la asesoría jurídica, ya se realizaban en el comedor social donde se estaban quedando sin espacio.

«El dispensario es necesario porque, a pesar de contar con una Sanidad Universal, en la práctica hay un rechazo a las personas sin hogar, y muchos no pueden acceder a un hospital», continúa el delegado, «esta acción nos permitirá poder mantener un control de los tratamientos de estas personas, guardarles su medicación en neveras, y también en los casos que nos sea posible poder ofrecerles atención bucodental para que puedan buscar trabajo con la boca en mejores condiciones ya que la imagen también es fundamental».

En este centro el voluntario tendrá un papel fundamental, al igual que todos los que atienden el comedor a lo largo de la semana. Será una trabajadora social la encargada de coordinar a abogados, médicos y profesores que aportan su tiempo de forma altruista. Además, Miguel Enrile adelanta que en breve se comenzará a prestar apoyo escolar a los niños que lo necesiten de las familias que atienden, y trabajan para en el futuro desarrollar un proyecto para combatir la exclusión digital.

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