La solidaridad ha vuelto a ser protagonista en Tomares. En esta ocasión ha sido gracias a la Hermandad sacramental de Tomares y a su tradicional Campaña Solidaria de Recogida de Alimentos «Échame Kilos» que se celebró el pasado 22 de noviembre.

Según han informado fuentes municipales, en tal sólo 3,5 horas se recaudaron 1.000 kilos de alimentos. Una cifra de récord.

Casi un centenar de costaleros de las dos cuadrillas de la Hermandad Sacramental, acompañados por la Banda Sinfónica Municipal de Tomares y componentes de la Banda de Cornetas y Tambores «La Cruz», del Camino Viejo, y de la Banda Padre Jesús de los Remedios de la Hermandad de la Plaza de Castilleja de la Cuesta, recorrieron las céntricas calles de Tomares, llevando a hombros la parihuela del paso del Cristo de la Vera-Cruz. Un recorrido que duró desde las 10.30 horas de la mañana hasta las 14.00 horas del mediodía, para pedir, casa por casa, alimentos para destinar a las familias necesitadas.

Una campaña con la que, como ha afirmado el Hermano Mayor de la Hermandad, Francisco Javier Rueda Maguillo, «el pueblo de Tomares se ha vuelto a volcar este año». Por ese motivo Rueda Maguillo no dudó en dar gracias a todos los vecinos y recordar que el objetivo es «conseguir que las familias con menos recursos cuenten con los alimentos necesarios para disfrutar de unas Navidades dignas».