La Hermandad Sacramental de la Sagrada Cena, a través de su Bolsa de Caridad, ha contribuido una vez más a ayudar a quienes más lo necesitan, esta vez pensando en los niños del Hospital Infantil Virgen del Rocío.

Según cuenta la Hermandad en una nota, ha comprado 10 termómetros digitales clínicos sin contacto con la piel con memoria de 60 mediciones. Como a los niños en el hospital les cuesta coger el sueño y dormir tranquilamente, estos termómetros evitan tener que despertarlos cuando están dormidos para tomarles la temperatura.

De esta manera, dichos instrumentos han sido entregados esta semana en el Área de Oncología Infantil del Hospital Infantil Virgen del Rocío por el Hermano Mayor, Joaquín Solís Tarín y el diputado de Caridad, Adolfo Fernández de la Hoz.

El diputado de Caridad de la Hermandad de la Cena nada más enterarse de la importancia de estos instrumentos para los niños ingresados en Oncología de este hospital se puso manos a la obra para recaudar el dinero necesario, 400 Euros. Reunir esta cantidad ha sido posible gracias a los donativos recibidos por diversos hermanos, así como a lo recaudado por los niños con el paso de la Cruz de Mayo y con la venta de papeletas entre hermanos y simpatizantes durante la celebración de la tradicional Cruz de Mayo de la Hermanad el pasado 10, 11 y 12 de mayo.

La Hermandad Sacramental de la Sagrada Cena, a través de su Bolsa de Caridad, realiza continuas acciones de acción social, desde reparto de alimentos a ayudas en el Economato Social Casco Antiguo o colaboración con el Proyecto Fraternitas del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla, entre otros, con el único fin de ayudar a quiénes más lo necesitan.