El Colegio de Aparejadores de Sevilla ha contribuido a la construcción de «La Azotea Azul», ese sueño por mejorar la vida de los niños ingresados en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, asumiendo los gastos colegiales derivados del proceso constructivo, tanto de la dirección como de la seguridad y salud de la obra.

El presidente del Colegio de Aparejadores de Sevilla, Javier Gómez Ramallo, ha recibido en la sede del colegio a las responsables de «La Azotea Azul», Marta Baturone y Pilar Lara, presidenta y directora respectivamente, según indican desde la entidad

Gómez Ramallo, que en esta reunión se ha interesado por el estado actual del proyecto, ha manifestado en referencia a esta iniciativa que «hay que convertir los hospitales en una prolongación de nuestro entorno diario». Asimismo, el presidente de los aparejadores sevillanos ha ofrecido la total colaboración con la Fundación El Gancho, responsables de «La Azotea Azul» para las actuaciones en materia constructiva que se lleven a cabo, así como las instalaciones del Colegio para la presentación de nuevos proyectos.