Desde su creación, hace ahora tres años, el llamado «Proyecto Niño», que impulsó la Cáritas parroquial de Nuestra Señora de la Oliva de Dos Hermanas para ayudar a los menores de las familias más desfavorecidas del municipio, no ha parado de crecer y aumentar el número de sus atenciones. En la actualidad, más de 200 niños de toda Dos Hermanas son asistidos a través de este proyecto, que nació para ayudar a las madres embarazadas y sin recursos, que necesitaban ayuda para la crianza de sus hijos.

Los voluntarios que trabajan cada día para atender a las familias y gestionar todas las donaciones que les llegan están, además, de enhorabuena, ya que la Obra Social La Caixa ha vuelto a entregarles otros 12.000 euros para destinarlos a la compra de alimentos o productos de higiene y primera necesidad para los más pequeños, fundamentalmente.

El director del área de negocio en Dos Hermanas de CaixaBank, José Antonio Romero, acudió el pasado viernes hasta la parroquia de la Oliva para entregar el cheque simbólico de esta donación a los representantes de Cáritas. «Intentamos atender todos los proyectos que se nos presentan y si vienen acompañados de la palabra ‘niño’ todavía más, con más razón si tenemos en cuenta que el número de beneficiarios se ha incrementado», explicó Romero.

En el sencillo acto estuvo presente el párroco de la Oliva, José Diego Román Fernández, quien agradeció la ayuda recibida pues «aún estamos atravesando ese periodo de crisis» y «el futuro depende de cómo alimentemos y eduquemos a los niños». A través de este proyecto se atiende a menores hasta los 16 años, cubriendo necesidades que van desde los alimentos y productos específicos para los bebés, como leche, cereales o pañales, pasando por ropa, cunas y carros, medicinas o material escolar.

El proyecto empezó con apenas cincuenta beneficiarios, aunque en la actualidad desde esta Cáritas parroquial se atienden a menores de toda Dos Hermanas y no exclusivamente de su feligresía, que es, de cualquier forma, la más extensa de toda la Diócesis. «Nos llegan derivaciones de los servicios sociales municipales, de otras Cáritas parroquiales y acuden, además, muchas familias que se enteran de que aquí ayudamos a los pequeños», explica su director, Antonio Fernández.

Más ayuda

Por esta razón, toda ayuda es poca. La Obra Social La Caixa lleva desde hace tres años colaborando con estas donaciones, a las que se suman también las de otras tantas personas anónimas que, puntualmente o de forma esporádica, ofrecen una donación económica o entregan material nuevo o seminuevo en perfecto estado.

Según explicó Fernández, está también en proyecto una segunda línea de trabajo específico para poder ayudar y prestar apoyo a las personas mayores del municipio, que se encuentren solas y necesiten compañía, asistencia o alimentos para su día a día.