Con la crisis del coronavirus el comedor social de Utrera atiende ya a más de quinientos utreranos
La demanda de usuarios del comedor social “Santiago el Mayor” de Utrera se ha incrementado notablemente en los últimos meses, debido al estado de alarma por la pandemia del Covid-19 y a la grave crisis económica que esta situación está provocando en la ciudad. Esto supone haber superado «con creces» lo registrado en los peores momentos de la crisis anterior.
Así lo demuestran las cifras que maneja este comedor solidario de la calle Cristo de los Afligidos, que al día de hoy contabiliza un total de 528 usuarios, de los que 392 son adultos, 97 niños y el resto son personas anónimas. Gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Utrera y de empresas locales y de particulares, desde el comedor social se está pudiendo atender esta gran demanda.
Todo ello es posible también gracias a la ayuda incansable de un grupo de voluntarios que trabaja de forma desinteresada en este comedor, gestionado por el grupo de fieles del Resucitado de Utrera. Aquí, desde que comenzó la crisis sanitaria se están ofreciendo alimentos a las familias más necesitadas del municipio tres días a la semana.

Así, desde que se decretó el estado de alarma, el comedor social no está prestando sus servicios diariamente como lo venía haciendo con anterioridad. Ahora, sólo abre sus puertas a los lunes, miércoles y viernes, en horario matinal de 10.00 a 12.00 horas. Durante estos días, atiende las largas colas de asistente y entrega únicamente alimentos no perecederos.
Según argumentan desde el propio comedor, la reducción a tres jornadas se debe, entre otros motivos a las dificultades encontradas para acceder a los alimentos que luego tiene que repartir, como las frutas de Mercasevilla, o la paralización de los abastecimientos procedentes de Mercadona, debido al gran número de personas que van a comprar a estos supermercados.
Cabe destacar que en Utrera, además del medio millar de personas que atiende el comedor social “Santiago el Mayor”, se encuentran numerosas familias necesitadas en situación de vulnerabilidad que reciben ayuda directamente del Ayuntamiento utrerano y de colectivos sociales como Cáritas, Cruz Roja , Vopam y Asoca, entre otras asociaciones.