Delia Solana y Mirella Venegas, son voluntarias de Cruz Roja en Sevilla. Ambas compaginan sus estudios con hacer voluntariado. Desde Cruz Roja luchan por promover la igualdad de oportunidades,  actúan con las personas que están en riesgo de pobreza y exclusión social, con las personas para ayudarles a mejorar la gestión de su salud y también en poblaciones más vulnerables de otros países ofreciendo ayuda humanitaria de emergencia, preparación y mitigación del efecto de los desastres, entre otros.

En Sevilla actúan en los barrios más desfavorecidos, intentando hacer más fácil la vida a las personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad. Por ejemplo, en temporada estival con actividades, talleres y campamentos para los niños de los distintos barrios. En Cruz Roja en Sevilla cuentan con un equipo de jóvenes voluntarios que colaboran para que estos niños tengan un verano diferente y divertido.

Mirella estudia un Grado Superior de Integración  y lleva cinco años como voluntaria en dicha entidad: «Estamos presentes con los niños en todo tipo de actividades. Empecé con la escuela de verano hace cinco años, después hice acompañamiento escolar. He compaginado desde los 16 años estudios, trabajo y voluntariado. Si quieres puedes, y siento que lo mínimo que doy los niños son super agradecidos, e irme feliz a cada es lo que más me enorgullece de hacer voluntariado», asegura Mirella.

Por otro lado, Delia es estudiante de Administración y Dirección de Empresas y considera que hacer voluntariado es cuestión de ser valiente y ponerle ganas: «Para mí ser voluntaria supone una enorme realización personal y requiere de mucha valentía. Te ayuda a eliminar prejuicios sobre alguien o cualquier grupo y es una manera de hacer algo por alguien sin recibir nada a cambio que es lo que más llena de hacer voluntariado», señala Delia.